Son las 3:26am del 4 de diciembre del 2012 y desde hace una hora aproximadamente, me ha despertado un dolor intermitente, agudo, que se aloja debajo del útero. No estoy segura si se trate de contracciones o es solo el útero que se está estirando a su máxima capacidad, sin embargo puedo decir que no se parecen en nada a las «Braxton Hicks» que había estado sintiendo los últimos 2 meses. Mi pequeñito ha estado muy activo el último mes, y ha crecido bastante, ahora siento el vientre súper pesado. Ayer que me pesé en el gimnasio la báscula decía 72kg, lo que significa un aumento de 13kg aproximadamente en todo el embarazo. Cada vez que voy con el médico me dicen que mi presión es la ideal, al igual que el ritmo cardiaco de mi peque.
El sábado pasado, tuve que acudir al hospital, ya que por la mañana tuve una pequeña descarga incolora e inodora y yo súper feliz pensé que se trataba de líquido amniótico y supuse que al llegar al hospital no me dejarían ir y me dirían que el trabajo de parto había comenzado. Sin embargo, después de realizar unos estudios, la enfermera en turno me bajó los ánimos diciendo que no se trataba de líquido amniótico y al romperse la fuente, debía tener una descarga constante y abundante. Aunque regresé a casa un tanto desanimada, me reconfortó el hecho de haber estado escuchando el latir de mi bebé por 10 minutos aproximadamente.
La enfermera colocó un cinturón elastico alrededor de mi cintura con un sensor redondo en la parte frontal que presionaba un poco mi barriguita, éste sensor era para detectar los latidos de mi peque y otro igual para detectar sus movimientos. Bueno pues inmediatamente que me los pusieron no se hicieron esperar las patadas y manoteos exactamente en donde se encontraban los cinturones :D. Me encantó saber que mi bebé está atento a lo que sucede, la enfermera dice que es un bebé muy feliz y muy activo!
Wow, este malestar físico que estoy sintiendo, podrían ser las contracciones de un parto verdadero! No soy buena describiendo sensaciones, pero es como si se desgarrara algo en mi interior, al mismo tiempo siento una presión incontrolable en la vejiga y pared del recto por unos cuantos segundos y después todo se relajara nuevamente. Y aumenta el dolor con cada movimiento de mi chiquitín, que por cierto parece que tiene fiesta ahí adentro, como de costumbre. Aunque esta vez esperaré un poco para ver si esta sensación continúa para hacerla saber a mis padres (que gracias a Dios están aquí con nosotros) y a mi esposo hermoso (que está durmiendo como un verdadero bb), ya que no quiero parecer paranoica. En fin, espero que haya llegado el momento, si no, ya escribiré en un rato lo sucedido. Chaito por hoy.
Diario de mi Bebé 
¡Ohhh! ¡Se acerca el momento!
Cuentanos si entras en parto! He oído de varias mujeres que no se dan cuenta que están ya en trabajo de parto sino hasta horas después.
Que emoción! Ya casi!